Durante el mes de enero en la Costa Blanca se genera casi tanta energía ciclista como en el Tour de Francia. Son decenas de equipos quemando vatios por Rates y Tudons en busca del FTP de sus corredores. Para los menos versados en potenciómetros, algo así como el mantra con el que planificar sus entrenamientos para esta temporada y ver el rendimiento que pueden llegar a dar en carrera. Uno de estos equipos es el Euskadi Murias Taldea, que en 2018 debuta en el categoría Continental Pro, y que nos abrió las puertas de su Campus en Benidorm para ver cómo hacen sus Test de Entrenamientos.
– III CAMPUS CICLORED JOSEBA BELOKI (8/11 MARZO) >
Así que tocaba sentirse pro por un día. Lo primero al llegar al hotel de concentración del Euskadi Murias era pedirle la ‘hoja de deberes’ a Xabier Muriel, el preparador físico del equipo. Había dividido al equipo en dos grupos de 10 ciclistas por orden alfabético. Los primeros salían a las 09.45 y los segundos a las 11.00. Aquí la decisión fue sencilla. El calor de Alicante de segunda hora del día. El recorrido iba desde Benidorm al Port de Tudons pasando por Finestrat. Hasta ahí todo fácil. Carreteras conocidas del Campus Ciclored. Terreno ‘amigo’. El problema venía con la velocidad y el esfuerzo. Xabier había previsto el día de Test de Entrenamiento del Campus. Con los últimos siete kilómetros de Tudons como escenario (los más duros y constantes en pendiente), había que hacer un test de un minuto, otro de cinco, otro de 20 y uno final de 10. Intensidad a fuego. A todo lo que diese el cuerpo. Eso sí, con intervalos de recuperación en bajada. Aún así salían 36 minutos de dar pedales al límite… Demasiado para un globero como el que escribe.
Además encuentro la excusa perfecta. El potenciómetro no me ha llegado todavía, así que no tendría sentido un test así. Y es cierto. El medidor de potencia y los vatios son la clave de este tipo de test de entrenamiento. El propio Xabier reconoce que ya las pulsaciones casi nadie las utiliza para entrenar y menos en equipos profesionales. Los vatios han ganado la batalla. También me explica el objetivo de cada uno de los test. El de un minuto servirá para medir la capacidad anaeróbica de los 20 ciclistas del Murias Taldea. La capacidad que tenemos para obtener energía sin uso de oxígeno. Es decir, para sprinters. El de cinco minutos correlaciona con la potencia aeróbica (consumo máximo de oxigeno) este lo suelen hacer bien los sprinters y también los escaladores con buen motor. Y el de 20 minutos es para determinar el FTP del ciclista, el umbral de vatios para una hora de esfuerzo (los resultados se extrapolan porque se calcula sobre el 95% del resultado total). Los famosos vatios/kilos que hemos oido hablar tantas veces. Para corregir posibles desviaciones del test de 20 minutos Xabier les somete a la ‘tortura’ de un nuevo test de 10 minutos con toma de lactato en la cima de Tudons. Los que den niveles demasiado altos no obtendrán su FTP real y lo tendrá que corregir.
Con todos estos datos Xabier tendrá que planificar los entrenamientos de cada ciclista para esta temporada. Eso sí, teniendo en cuenta los que ya tiene de pasadas temporadas y lo resultados de los test que van haciendo durante este año para comprobar como evolucionan. Y… cuando empiecen las carreras, el preparador fisico también podrá obtener el rendimiento de cada ciclista en su mejor minuto de competición, sus cinco mejores minutos, sus 20 mejores… Todo para saber cómo está cada ciclista en un momento determinado.
Pero ya sabemos que los vatios por si solos no sirven, tienen que ir medidos con respecto al peso de cada ciclista. Así que por la mañana todos han pasado por la báscula y por los test antropométricos y el famoso test de pliegues (ese que van con una pinza midiendo la grasa que tenemos acumulada en el cuerpo y que saca tus mayores vergüenzas) para determinar los vatios/kilo. Con los deberes técnicos hechos. Tocaba empezar a dar pedales.
A QUEMAR TUDONS
Con la teoría aprendida toca dar pedales y mirar con envidia las Orbea Orca del equipo. Por ahora todos con el modelo racing montado en Shimano Durace con las ruedas Vision. Un modelo ultraligero, que se nota con solo sopesar las bicicletas a primera vista. Ale, ya tienen una ventaja para soltarme subiendo. Para compensar utlizamos la misma marca para cascos, zapatillas y gafas. Así que sus Spiuk deben pesar lo mismo que las mías. El inicio hasta que salimos de Benidorm es totalmente llano y los chavales del grupo 2, Loubet, Saez, Prades, Samitier, Sanz, Txoperena, Udondo y los dos Rodríguez, Sergio y Óscar. se lo han tomado con tranquilidad.
Da tiempo para hablar de las carreras de esta temporada, de cómo marcha el proyecto del Murias, de los sueños de una posible invitación a La Vuelta a España y… de los test que van a hacer en Tudons. Eso sí, después de los repechos de Finestrat, en los que tengo que desconectar la emisión de ‘Radio Ciclored‘ como me llama el amigo Beloki. El suave ascenso hasta Sella vale para que nos crucemos con el CCC polaco, que va a hacer lo mismo que nosotros en Tudons, y para que Sergio Rodríguez, que además de ciclista del Murias es licenciado en INEF, me explique al detalle como aplica los resultados de los test de entrenamiento.
Pasado Sella nos adelanta un Astaná que va como si se hubiese subido en una moto. Su test va a ser de más de 20 minutos… Al llegar a falta de siete kilómetros para la cima parada y uno por uno a sprintar. Pega viento de cara, pero da igual. La velocidad a la que pasan de uno en uno da la sensación de que van bajando en vez de subiendo. Por entonces ya tenía claro que con llegar a la cima de Tudons de forma digna iba a ser suficiente. Así que kilómetro y medio más adelante les espero para ver el test de cinco minutos. No sé los resultados que obtendrá Xabier, pero la velocidad es prácticamente similar.
Toca dar pedales para ganar ventaja porque sería demasiado humillante que me pasaran también en el test de 20 minutos (después de haber bajado al kilómetro 7 y haber recuperado). Objetivo cumplido. Consigo llegar a la cima, pero con no demasiado buena cara porque Jon Odriozola, el director y alma mater del equipo me ofrece agua y comida. Alguna barrita sí que habrá que tomar. Da tiempo todavía a bajar a falta de un kilómetro y medio para la cima e intentar seguir el ritmo que traen después de cuarto de hora de esfuerzo. El resultado, 600 metros a rueda y explosión.
Así que para el test ‘tortura’ final de 10 minutos aprovecho para bajar a esperarles a Sella, que hace mejor temperatura, y cruzarme con todo el Vital Concept que también ha elegido este día Tudons para realizar sus entrenamientos. Solo espero que los test les hayan hecho efecto en las piernas y no me dejen de rueda en los repechos del embalse de Amadoiro camino de Villajoyosa. Edu Prades, que además es colega desde hace tiempo, pone ritmo de amigo hasta Benidorm. No en vano solo es es tercer día de Campus y con la tontería les han salido 100 kilómetros y 1.800 metros de desnivel. Todavía les queda casi una semana de entrenamientos, esta vez ya divididos en grupos de escaladores y sprinters, para individualizar la puesta a punto de cara a la Challenge de Mallorca, la primera cita del año para un Murias Taldea que va a tener un calendario más que completo y que tendrá semanas en las que dividirá el equipo en tres frentes distintos. Un lujo para un debutante en la categoría y que se ha ganado con su trabajo en años anteriores en Continental.
LOS DEBERES POST ENTRENAMIENTO. NUTRICIÓN, BIOMECÁNICA, MATERIAL…
El trabajo de los ciclistas del Murias no acaba después de la comida. Por la tarde toca masaje para recuperar y charlas para mejorar. Sobre vatios, nutrición, pruebas biomecánicas y médicas, de material (un concepto similar al que haremos en el Campus Ciclored) Ahora mismo la base del ciclismo profesional consiste en individualizar todos los aspectos del entrenamiento y cuidar cada mínimo detalle para sacar el máximo partido al ciclista. El propio Xabier Muriel así le reconoce. «En nutrición se ha mejorado tanto que ya se sabe lo que se hace mal y lo que debe comer cada uno. Incluso le vamos a hacer un análisis genético a cada ciclista para personalizar todo. En alto rendimiento ahora mismo la personalización es clave. O haces eso o tienes un motor descomunal. La diferencia en competición entre ir a 6 vatios kilos o 6,05 vatios kilos puede marcar el ganar o no una carrera«.
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Lo que si tiene claro Xabier es que los datos que salen de los test son solo una parte del rendimiento del ciclista en competición, que hay que tenerla al máximo, pero que también influye la colocación, la hidratación, la buena alimentación ese día, la capacidad de sufrimiento, constancia, táctica, la psicología. «Los test dan solo el potencial físico. Pero si eres muy malo colocándote en el pelotón gastas demasiado y el día de la carrera al llegar al puerto no das los vatios/kilo del test. Tienes el potencial, pero no lo sabes utilizar. Eso a los entrenadores nos sirve para ver los errores que pueden cometer los ciclistas. Y al revés, hay gente que da mejores datos de rendimiento en carrera que en el entrenamiento por la motivación y el sufrimiento al que puede llegar«.
También nos confirma algo que ya sabíamos. El core se ha convertido en algo esencial para el ciclista profesional desde hace una década. «Antes se hacía en los Campus, pero ahora ya todos los ciclistas lo hacen en su casa. Se ha convertido en esencial. La teoría dice que la fuerza pasa de los brazos del manillar a las piernas y los pedales a través del tronco, y que un tronco fuerte hace que se transmita mejor sin perder nada por el camino. Además de prevenir lesiones, claro».
Una charla con Sergio Rodríguez sobre entrenamientos (tendreis pronto la entrevista), la lista de carreras a las que van a ir esta temporada, que me facilita Jon Odriozola, y una larga conversación con Unai Iraragorri, responsable de comunicación del Murias Taldea, me sirven para despedirme de Benidorm y de sus buenas temperaturas hasta el próximo mes de marzo que volvamos al Campus Ciclored.
