A mediados de la pasada década comenzó a aparecer el modelo de sillín para proteger la próstata. Con su diseño peculiar, con una abertura en la parte central del sillín, se convirtieron en una nueva moda que aseguraba proteger la salud del ciclista después de muchas horas sentado. Después llegó la versión con la punta recortada o incluso sin punta. La causa, la misma para ambas modificaciones, la presión que ejerce el asiento en la zona perineal del ciclista. Pero, es solo eso, una moda, tiene fundamentos científicos o no es aplicable a todo tipo de ciclistas. Vamos a verlo.
Lo cierto es que todavía no existe un estudio completo que confirme una correlación directa entre la práctica del ciclismo y las dolencias de próstata, aunque es casi seguro de que si ya se sufren dolencias de próstata el hacer muchos kilómetros pueda agravarlas.
Eso si, para los que tienen problemas de próstata y eligen un sillín antiprostático deben pasar por el biomecánico para que regule su posición en la bicicleta y le diga que tipo y tamaño de sillín elegir. La clave para no sobrecargar la zona perineal del ciclista está en sus isquiones. El biomecánico se encargará de medir la distancia de ambos y recomendar la anchura y longitud adecuada del sillín. Una vez tengas estas medidas, es hora de ir a la tienda y hacerte con uno.
En el mercado vas a encontrar sillines antriprostáticos para todas las clases de ciclismo. Desde MTB a carretera de competición, más cicloturistas o triatlón.
Estas son algunas de las ventajas que te puede aportar el sillín antiprostático correcto y bien colocado.
- El peso de tu cuerpo se apoya sobre los isquiones y no sobre la zona perineal, que es donde se aloja la próstata.
- Al reducirse la presión sobre la zona pélvica hace que la circulación de la sangre mejor.
- Cuando sufres dolencias crónicas de la próstata, como la incontinencia urinaria, puede ayudar a que no se agraven..
- La certeza de que al estar colocado por un biomecánico será más cómodo y permitirá hacer más kilómetros sin molestias.
Las desventajas de los sillines para proteger la próstata son pocas, aunque alguna hay.
- Son algo más caros que los modelos habituales y si realmente no lo necesitas es una inversión innecesaria.
- Si tienes alguna dismetria (cadera desviada o una pierna más larga que otra) pueden no ser los más adecuados.
- Revisa son frecuencia los más acolchados, sobre todo si vas a hacer muchos kilómetros, suelen acabar hundiéndose y provocando lesiones.
- Si eliges un antiprostático sin punta deberás pasar casi obligatoriamente por el biomecánico para ir bien acoplado a la bicicleta.