Solo un dato. De los 20 equipos que disputarán el Tour de la Provence, 12 estuvieron en enero entrenando en la burbuja ciclista de la Costa Blanca. El Covid 19 ha complicado la preparación de los equipos, pero una vez más han repetido en los mismos lugares. Eso sí, con medidas extra de seguridad. En Ciclored Comunicación lo vivimos desde dentro.
Son las 08:00 del martes 12 de enero en el Hotel Cap Negret y es hora punta en el desayuno. El amplio salón del buffet está dividido para cada uno de los equipos ciclistas que ese día se encuentran allí alojados. Todos tienen que repetir ubicación, misma silla y misma mesa, y está prohibido mezclarse con el resto de los equipos.
Hay un buffet común al que se puede acceder después de ponerse guantes, aunque el acceso está controlado por el personal del hotel, que no permite más de tres o cuatro personas a la vez. Las máquinas de café, el vicio de cualquier ciclista, son individuales para cada ‘equipo-burbuja’.
Esto se repite en la cena, aunque al haber equipos de varios países y distintos horarios es más espaciada y también a la hora de la comida, aunque aquí depende del entrenamiento de cada día.
HOTEL CERRADO PARA CICLISTAS Y CON PCR NEGATIVA
No es la única medida de seguridad. El hotel está totalmente cerrado a ciclistas profesionales y a personas acreditadas por los equipos. No puede reservar cualquiera. Al registrarte en el hotel debes presentar un test Covid negativo realizado como máximo 72 horas antes. Cada 10 metros te encuentras un bote de gel hidroalcohólico para lavarte las manos. Y, evidentemente, la mascarilla es obligatoria salvo cuando estás comiendo.
Cualquier medida es poca para mantener alejado al Coronavirus de los hoteles de concentración de los equipos que preparan una temporada 2021 que se antoja todavía incierta. Aunque para estar a punto necesitan juntarse, rodar en equipo para hacer los primeros test, conocerse y probar el material.
En nuestro caso estamos junto al Caja Rural Seguros RGA. Para 2021 nos vamos a encargar de la comunicación de ULEVEL, la nueva marca de ropa que patrocina al equipo, y la presentación era un hito obligatorio de cubrir. Eso sí, éramos casi los únicos. Sala amplia, Juan Mari Guajardo al micro, los ciclistas, los técnicos, los directivos y una señal de streaming para que se pudiese ver las redes sociales.
Durante el mes de enero, además del Caja Rural, pasaron por el mismo hotel el Bahrein Mérida (que tenía prohibido utilizar los ascensores comunes y estaba en salones privados), Arkea (masculino y femenino), Total – Direct Energie, Topsport Vlaanderten, Bingoal Wallonie, Alé Cycling, Euskaltel y varios conjuntos de mtb, a los que luego se unieron algunos ciclistas a título personal. La razón, el 95% de la amplia planta hotelera de la Costa Blanca (Benidorm incluido) estaban (y siguen estando a 8 de febrero de 2021, cerrados)
HOTEL DENIA MARRIOT, CADA EQUIPO EN SU PROPIA ALA
Otro de los hoteles ciclistas por excelencia en la Costa Blanca es el Denia Marriot La Sella, un cinco estrellas situado dentro de un campo de golf. Allí han extremado al límite las medidas de seguridad frente al Covid, tanto, que tuvieron que limitar la presencia de equipos completos a solamente dos, AG2R y Trek Segafredo, y a un tercio del Lotto – Soudal. Y cerrar el hotel a otras reservas en las dos semanas de enero que estuvieron allí entrenando.
Cada uno de los equipos completos (AG2R – Citroen y Trek – Segafredo, también con la división femenina) ocupaba un ala diferente del hotel, tenía comedores diferentes y salas para guardar las bicis y de reuniones de los directores diferentes. Incluso en el comedor no había buffet, sino que a cada miembro del equipo (unos 30 ciclistas y otros tantos auxiliares y técnicos) los servían los camareros del hotel.
El tercer equipo, el Lotto – Soudal, optó por otra táctica para combatir al coronavirus. Dividió al equipo en tres bloques diferentes, llaneadores, escaladores y clasicómanos, y los repartió por tres hoteles distintos de la Costa Blanca. Altea, Jávea y Denia. Los que estaban en el Marriot solo ocupaban la zona de apartamentos y tenían comedor propio para no encontrarse con Trek y Ag2R.
Para febrero esperaban a otros equipos, pero siempre divididos en diferentes alas y dejando un alto porcentaje de habitaciones vacíos. Su director nos contaba que había tenido que rechazar multitud de peticiones de equipos solo por cumplir la estrictas medidas de seguridad a las que obliga la Comunidad Valenciana.
MÁS DE MEDIO PELOTÓN EN LA COSTA BLANCA
El Astana también estuvo concentrado casi todo el mes de enero en la Costa Blanca, en un hotel ciclista de Benidorm. Además de pcr negativa antes de la concentración, el equipo se dividió en tres bloques para entrenar y para convivir en el hotel. El objetivo era que, pese a compartir hotel, no se juntaran para nada. Solo el día de la presentación oficial tuvieron contacto entre ellos en el comedor, eso sí, después de pasar la enésima pcr. Gorka Izagirre nos confesó que ya iba por más de 20 desde que volvió a competir en agosto de 2020.
Había más equipos ciclistas en la Costa Blanca concentrados. En Calpe el Team DSM (antiguo Sunweb) y el Deceuninck Quick Step, en Benidorm parte del Cofidis, en San Juan el Jumbo Visma, en Oliva el Bike Exchange (antiguo Mitchelton) tanto masculino como femenino, el B&B Vital Concept y el Eolo Kometa. En Villajoyosa el Kern Pharma.
Casi todo el pelotón World Tour y gran parte del continental que encontraron una válvula de escape para entrenar en la Costa Blanca, donde esos días era más sencillo cruzarse con la bici a un pelotón de ciclistas profesionales que a uno de aficionados (entre otras cosas porque estaba restringida la movilidad en grupo).