El ciclismo te permite escribir leyendas en los mismos puertos que sufrieron los más grandes. El Alpe d´Huez es para todos igual. Peses 50, 70 o 120 kilos. Siempre vas a enfrentarte a un coloso al que intentas vencer. Los llamamos puertos cicloturistas. Merckx, Indurain y Contador lo hacían para ganar el Tour y tú para llevarte la honrilla de la grupetta o simplemente para pisar la cima y subir la foto al perfil del whatsapp.
Da igual. El ciclismo es así y en ciclored.com te vamos a mostrar los 5 puertos de montaña a los que debes de subir antes de colgar la bicicleta. Los lugares donde se ha escrito la historia del ciclismo y en donde te vas a sentir como parte de la leyenda. Algunos una simple cuesta y otros cimas por encima de las nubes. Y eso sí, a todos te vamos a llevar en 2017.
KAPELMUUR
En el país de los ciegos… el tuerto es el rey. Pues eso. Que Flandes es una región plana como la palma de la mano y una pequeña cuesta aderezada con muchos adoquines y un trocito al 18% se convierte en en muro. Así es el Kapelmuur , el auténtico Rey del Tour de Flandes, que vuelve en la edición de 2017 después de años fuera del recorrido oficial.
Es el gran mito de Flandes. En cifras el Kapelmuur es sólo 1 kilómetro de subida a una media del 6,8% con un pico del 20%. Allí el ciclismo de Flandes peregrina para rendir culto a su pasión. Allí Cancellara y Boonen protagonizaron la última gran historia de Flandes.
STOCKEU
Otra cuesta insignificante en una región plana. Valonia no tiene grandes puertos, pero el Stockeu tiene una leyenda asociada a la Lieja-Bastogne-Lieja y Eddy Merckx. Dos nombres ante los que cualquier ciclista debe rendir respeto.
Los poco más de 2 kilómetros y 10% de desnivel del Stockeu se llevan subiendo desde 1892 en la Lieja, La Decana de las carreras ciclistas profesionales. Y allí Eddy Merckx cimentó gran parte de sus cinco triunfos. Un monumento recuerda las hazañas del mejor ciclista de la historia.
ALPE D´HUEZ
Apareció en los años 50 en el Tour. Coppi apuntó su nombre. Despareció hasta los 70 y desde entonces se ha convertido en un habitual. Alpe d´Huez no es el puerto más duro del Tour (un 8% de media), ni el más largo (13 kilómetros), ni el más alto (1.800 metros). Simplemente es el Tour. Allí se han escrito las leyendas más importantes de los últimos 40 años de ciclismo.
La Marmotte le rinde pleitesía cada año y en esta ocasión el Tour de Francia le premia con la penúltima etapa de la edición de 2015. Las 21 curvas más importantes del mundo están al alcance de cualquiera… pero si vienen después de Galibier, Madeleine y Croix de Fer la cosa se complica.
TOURMALET
A principios del pasado siglo el Tour de Francia buscaba nuevas emociones y descubrió el Tourmalet. Lo mezcló con Aspin, Peyresourde y Aubisque y salió la primera etapa de montaña de la historia. El rey de todos ellos se llama Tourmalet. Una cima que con sólo pasar por ella hace que se te pongan los pelos de punta.
Las dos vertientes del Tourmalet, Campan y Luz, superan los 16 kilómetros de ascensión con un porcentaje del 7,4% para alcanzar los 2115 metros. Ahora mismo la mejor opción es La Marmotte Pirineos, que desde 2016 lo tiene incluido de forma habitual y por sus dos vertientes. La cita es en agosto… y no exenta de dureza porque la etapa suma más de 5.500 metros de desnivel.
MORTIROLO
Su leyenda es joven, pero va asociada al Giro a Pantani, a Indurain y a la dureza extrema. El Mortirolo fue la primera cumbre imposible de porcentajes extraordinarios.
Después llegaron el Angliru o el Zoncolán, pero los 12 kilómetros de subida desde Mazzo di Valtellina a más del 10% tienen el honor de ser sinónimo de sufrimiento.
El Mortirolo es la estrella de los Dolomitas junto al Stelvio y el Pordoi, cimas que podrás afrontar en nuestro viaje a la Maratona de los Dolomitas.